Rodrigo Alves es un brasileño de 32 años de edad, quien lleva años de su vida pasando por intervenciones quirúrgicas para lograr alcanzar tener el cuerpo y el aspecto del muñeco Ken, el novio de Barbie.
La cantidad de operaciones que se ha realizado es de 42, gastando un monto total de 350,000 euros.
Ha contado su historia con las siguientes palabras: “A los siete años me enviaron a un internado. Los niños me empujaban por las escaleras y metían mi cara dentro de un urinario. Tenía pechos como las mujeres y estaba gordo, feo y deprimido. Sólo quería estar aceptado por la sociedad y conseguir acercarme al ideal de belleza brasileño”.
Los médicos aseguraron que Rodrigo tenía un desequilibrio hormonal. Cuando tenía 17 años se sometió a una reducción de pechos. Luego se mudó a Londres y allí tuvo la primera de sus cinco operaciones de nariz.
Se apoyó de su trabajo como modelo y de la herencia que le dejaron sus abuelos para costear todas sus operaciones.
Otras de sus afirmaciones han sido: “Me merezco una medalla por todo este trabajo. Valió la pena todo el dolor para alcanzar la perfección”.
Ha incurrido en gastos de 12.000 euros para levantar su trasero, 30.000 euros en implantes de pecho de silicona y más de 40.000 euros para operarse la nariz.
Pero sus intenciones han ido más allá, y a partir del año 200 se ha convertido en una mujer transgénero. Se ha operado más de 50 veces para lograr convertirse en Jessica Alves
Sus palabras fueron: “Realicé esas cirugías plásticas porque realmente quería ser mujer… Tengo disforia de identidad de género. Lo he estado tratando. Soy conocido como Ken, pero por dentro siempre me he sentido como Barbie». «No tengo la menor duda de ser mujer. Todavía tengo más cirugías plásticas que hacer, me agrandarán los senos, la cirugía de voz, así que tengo una voz más femenina y en un año tendré mi cirugía de reasignación de género».
«Ojalá hubiera empezado antes mi reasignación de sexo, en vez de gastar tiempo y dinero en intentar convertirme en el hombre que no quería”, confesó a algunos medios. “Soy mucho más feliz ahora y me siento más yo misma”.