Este hombre, enojado y desesperado porque su esposa solo le daba sopas instantáneas para alimentarse, decide no tolerar mas la situación y pedir el divorcio de una vez y por todas.
Resulta que se casaron y el esposo no sabia que su amada esposa no sabía freir ni un huevo y lo que le esperaba no era falta.
No se sorprende cuando la primera mañana de convivencia, ella le da un gran plato de sopa instantánea. Sin embargo, cuando recibe el mismo plato a la hora de almorzar y en la cena, empieza a pensar que algo anda bien.
Esta situación se extendió por muchos días consecutivos, y este hombre atormentado por la situación, decidió ponerle fin a su tortuta.
¿Y tú? ¿Qué harías?