El cartílago es el que se encarga de dar soporte a estructuras como las articulaciones, unir a los huesos entre sí y permitir su movilidad. Dependiendo de la gravedad de la lesión vas a requerir fisioterapia y algunas veces el daño en estas estructuras es irreparable.
La zona que más se compromete suele ser la de las rodillas ya que estas tienen que soportar todo nuestro peso, sin embargo, también pueden sufrir mucho los hombros, las muñecas o los talones.
El cartílago lesionado, inflamado o incluso dañado puede causar síntomas como dolor y limitación del movimiento. También puede conducir a daños articulares y deformidad.
Ambos tejidos pueden verse afectados por distintas causas, entre ellas las siguientes:
- Movimientos repetitivos.
- Transporte de objetos pesados.
- Ejercicio físico en exceso.
- Lesiones.
- Sobrepeso
- Envejecimiento.
- Enfermedades degenerativas, como artritis.
Existen remedios caseros que pueden ayudar a recuperar la movilidad y disminuir el dolor, siempre y cuando tu caso no sea severo y tengas que asistir al medico.
Ingredientes que necesitas:
2 cucharadas de gelatina sin sabor.
1 naranja.
1 banana.
2 cucharadas de agua.
2 cucharadas de miel.
Preparación
En un tazón machaca la banana y luego exprime el zumo de la naranja. Luego incorpora la miel y remueve todo hasta que esté bien mezclado.
Lo siguiente es disolver la gelatina en el agua y calentar a baño maría. Agrega la mezcla de la banana a la gelatina y remueve muy bien.
Lleva esta mezcla al refrigerador durante 20 minutos.
Primero, exprime el zumo de la naranja. Machaca el plátano.
A continuación, mezcla el puré de plátano con la miel y reserva.
Luego, disuelve con agua la gelatina y calienta a baño maría.
Vierte el zumo de naranja y mezcla bien.
Después, coloca en un molde y lleva al frigorífico por 20 minutos.
Debes comerlo 2 veces al día.